Roger Williams Park in Providence, RI. Foto: Mayra Martinez |
El otoño es la mejor manera que tiene la Madre Naturaleza de decir a quienes viven en Norte América que estemos listos para los tiempos ventosos, nevados, y helados del invierno. Al mismo tiempo, es otra forma maravillosa de decir que hay un tiempo de espera para volver a vivir otra colorida étapa con clima fresco y ropa glamorosa. Es la promesa de que volvera el próximo año con una nueva demostración de colores tostados en cada puesta de sol y un ambiente más relajado después del calor del verano.
Roger Williams Park. Foto: Mayra Martinez |
Los movimientos de tiempo son
más visibles en el paisaje. El Parque
Rogers Williams en Providence, las carreteras y espacios públicos son
excelentes espacios para ver la combinación de colores como el rojo, amarillo,
verde y marrón sobre montones de hojas. Crean
una película delante del observador con esas hojas de colores dando vueltas,
subiendo y bajando. Las hojas de los
árboles parecen caer plácidamente mientras utilizan el ritmo del viento para
bailar al canto de los grillos y otras aves que no saben si emigrar o quedarse
hasta el invierno.
Durante el otoño los días y las
noches son regulados por un reloj natural que permite que los días no sean tan
cortos como son durante el invierno, o tan largo como en verano; sin embargo,
permiten a las personas llevar a cabo sus actividades con más calma y armonía
gracias a las agradables temperaturas que prevalecen en esos meses. Al final de cada día, esta el espectáculo de
la puesta de sol. Manchas de color ocre se colocan alrededor de la puesta de sol enrojecido, se entremezclan con el
entorno de nubes, para dar paso a una gigantezca luna de queso que parece
sonreír a quienes las miran.
Foto: Mayra Martinez |
Cuando el día se convierte en
noche y la mayoría de las personas están regresando a sus hogares después de un
intenso día de trabajo, la terraza Es el lugar ideal para disfrutar de una taza
tibia de té o chocolate caliente sin dejar de reconocer la grandeza y la
majestad de la madre naturaleza y su derroche de colores armónicos, olores y mágicos
sonidos.
Otro aspecto que hace que la
época más maravillosa sea el otoño, es la temperatura. Durante el verano, la
vestimenta tiene que ser muy ligera para combatir las altas temperaturas,
mientras que en el invierno es lo contrario: demasiada ropa para protegerse de
las bajas temperaturas. Durante el otoño hay una transición entre las dos
estaciones climáticas más adversas; de modo que la gente puede usar ropa abrigadora
pero cómoda y ligera, para sentirse protegidos y sin sudor.
Cada año, la llegada del otoño
es una de las más anheladas para disfrutar de sabrosos guisos, estofados, sopas
y otros alimentos calientes de diferentes culturas; pero también hay que estar
preparados para nublados, brumosos y
lluviosos días; todos los elementos son parte del paquete que acompaña la
temporada. Mi estampa favorite es pararme
en el umbral de mi puerta, protegida con un chal y mientras tomo una infusión
de frutas, disfrutar del espectáculo de
escenas de colores de las hojas secan bailando con el viento dirigidas por fantasmas
invisibles, o del cielo amarillento que dice "disfruta los últimos rayos de
sol porque ahora es el momento de que la
luna te deslumbre con su sonrisa juguetona."
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